23Mocomoco 18 de marzo de 2005:

De nuevo en Mocomoco previa visita a Italaque para seguir las obras de la iglesia. Al llegar a la parroquia como siempre mis amados niños me estaban esperando, pero lo que ya es una norma es que los adultos empiezan a venir a misa, de hecho casi estaba llena la iglesia en las misas de diario.
El sábado hice un programa de radio en directo desde Buenos Aires via conexión con Mocomoco, el programa era sobre el P. Francis, pues el padre estuvo anteriormente en Buenos Aires de misionero y querían información sobre las obras del padre.
Durante todo el sábado tuvimos reunión de catequistas, en un buen clima, pero lo que más me gustó es que entendieron que ahora hay más trabajo al tener que llevar dos parroquias con sus respectivas comunidades. Pero como no quiero que en Mocomoco las actividades se detengan hemos iniciado el proyecto de ganado. Sé que corro el riesgo de cargarme demasiado pues ahora tengo dos guarderías, dos desayunos escolares para unos 200 niños, tres desayunos en comunidades, una escuela de fútbol y la atención a dos parroquias, pero Dios me da fuerza y serenidad para ir llevando todo poco a poco adelante.
El domingo de Ramos después de celebrar en Italaque me fui a Mocomoco. Uno de los catequistas se vistió como de Cristo y subido en un burro hicimos la procesión de los ramos, fue original, pero después de misa como siempre preparamos comida para los niños, pues el caso es que hubo 42 niños comiendo en la parroquia. Lo bonito es que cada uno traía algo para compartir, en esta ocasión hicimos arroz, patata, huevo frito y yo puse el chorizo y las salchichas.
La gente de Mocomoco me dice que tenga cuidado con el coche que es peligroso ir y venir por estos caminos, y ellos mismos me dicen que no viaje solo que la situación está muy complicada, no se, pero desde la muerte del P. Francis veo a los aymaras muy preocupados por mi seguridad. Además la gente de Italaque me pide que no falte mucho del pueblo que con mi presencia es como si todo siguiera igual, que les doy seguridad, esto lo dicen porque desgraciadamente ya ha habido algún que otro impostor que se ha presentado en el pueblo, y como dice el P. Aníbal que me quiere colocar la placa de “sherif”, pero creo que es de pocos escrúpulos querer aprovecharse de la situación de la muerte de un sacerdote para sacar partida. Digamos que momentáneamente he sacado el carácter español y he puesto las cosas claras antes de que la situación se nos pueda ir de las manos.
El martes fui al Alto para asistir a la misa crismal que se celebraba en la catedral, fue muy emotiva, incluso el obispo recordó algunas de las palabras que dije en el funeral del P. Francis. Por la tarde el canal 57, que es un canal católico, me pidió que fuera a la TV para hablar sobre la Semana Santa, debí de hacerlo bien porque a la mañana siguiente de nuevo estaba en el canal hablando de nuestra misión. Entretanto saqué tiempo para acelerar las gestiones de la compra de un coche, pues la organización MIVA de Eslovenia había concedido al P. Francis la compra de un coche. Ahora en la misión necesitamos este coche nuevo porque uno de los coches tiene 250.000 km y tanto km por estos caminos es mucho para un coche, y el otro que tenemos casi mata al P. Aníbal ya que se rompió la dirección. En la misión he aprendido que hay dos cosas importantes que cuidar, una nuestra seguridad en los desplazamientos y otra la alimentación, si lo descuidamos la vida está en peligro.
La semana santa:
Hoy Jueves Santo hemos comenzado el día con una oración, es la primera vez que hacemos oración pues hasta ahora siempre habíamos tenido misa. La iglesia ha estado llena de niños incluidos los de la guardería y han venido algunos adultos. A media tarde hemos preparado dos horas de juegos para los niños que se lo han pasado en grande, después hemos repartido palomitas y dulces. A la noche hemos celebrado la Cena del Señor, la iglesia llena y en un ambiente de silencio muy bonito. Al llegar el momento del lavatorio de los pies he escogido a tres niños, tres jóvenes, tres adultos, y tres ancianos. Lo bonito ha sido que cuando lavaba los pies me decían “gracias padre” “que Dios le bendiga” incluso un hombre me ha besado la mano después de lavarle su pie. Después de la comunión he repartido a todos aquellos que no han hecho la primera comunión un pan pequeño que he mandado hacer. Ya que hoy es el día de la Eucaristía me ha parecido oportuno que todos participaran de alguna manera más plena de la eucaristía. Yo les decía pan bendito y ellos respondían amén. Después hemos preparado un altar (monumento) sencillo, pero bonito, desde los niños a los adultos se han arrodillado ante el Señor para orar un momento. Luego ya de noche hemos orado una hora, con canciones y textos de la Biblia, de nuevo la iglesia estaba casi llena. Sinceramente creo que hemos empezado con mucha devoción esta Semana Santa.
Viernes Santo:
Esta mañana de nuevo comenzamos con una oración, mis hijos como siempre estaban puntuales. Después hemos preparado la cruz, a la Virgen de la Soledad y al Santo Sepulcro para la procesión de la noche. A las dos de la tarde hemos hecho el vía crucis subiendo a una montaña que llaman el Calvario. Es la primero vez que se hace un vía crucis al Calvario, la gente ha respondido muy bien se les veía muy ilusionados. Después hemos celebrado La Pasión del Señor y ha sido especialmente emotivo la adoración de la cruz pues la gente besaba los pies y las rodillas de Cristo y muchos decían “perdónanos”. Acto seguido he proyectado la película de La Pasión de Mel Gibson y yo calculo que habría unas doscientas personas viendo la película, la han seguido con mucha atención y muy metidos en la película. Después hemos hecho la procesión del Santo sepulcro y de la Soledad, todos estaban contentos porque hacía muchos años que no se salía en procesión.
Sábado Santo:
Un día tranquilo, por lo menos en la mañana, la gente del pueblo habla del vía crucis y de la procesión con orgullo. Por la mañana hemos tenido una oración digamos que estaban los niños y algunos jóvenes. Hemos tenido una reflexión sobre la esperanza y después los niños han dibujado y escrito frases animando a tener esperanza. A la tarde he ido a Italaque atener una reunión con los catequistas y programar algunas visitas. A la vuelta a Mocomoco hemos tenido un consultorio dental improvisado, les hemos puesto fluor a los niños de cuatro años en adelante. Después hemos tenido la Vigilia Pascual, al principio no había mucha gente pero después se ha llenado la Iglesia como el día de Navidad, no me lo creía. Ha durado la misa dos horas y todos tan contentos. Después he invitado a chocolate y bizcochos a los asistentes. Se les veía muy felices y claro yo al verlo así tan bien me sentía feliz.
En la Vigilia Pascual he recordado a mi hemano el P. Francis y a los papás de mis dos compañeros en mi Parroquia de San Matías, P. Víctor y P. Felipe que han perdido a una madre y a un padre respectivamente. Aunque la tristeza sigue ahí presente, sobre todo el vacío que te dejan en el corazón los seres queridos, sé que mi Dios Jesucristo los va a resucitar a una vida sin dolor, ni sufrimiento. Y sé que desde el cielo nos estarán ayudando a crecer en la esperanza de que es posible hacer de este mundo un cielo parecido al de allá arriba.
Felices Pascuas