Sr. Aguillo

Nuestro presidente al habla



En estos últimos tiempos se ha puesto en tela de juicio la honestidad de alguna ONG, sucesos puntuales y el eco mediático han hecho que nos replanteemos algo que solemos dar por supuesto. Es bueno no dar las cosas por inalterables y es positivo ser exigentes con nuestras cosas . Tambien lo es tratar de ser justos y ello suele suponer implicarnos en aquello que elegimos.

Si hay algún caso de corrupción que se sepa y se corrija pero es muy injusto, para tantos como trabajan sin esperar compensación material por ello, que se cuestionen sus motivaciones, modos de trabajo e incluso intenciones últimas.

El papel que hemos ocupado las ONGs n esta sociedad ha sido ganado con esfuerzo y bien hacer, con motivaciones positivas y el concurso de muchas voluntades sumadas a tares humanitarias y justas.

Nuestros colectivos son el fruto de la organización en una sociedad que demanda aquello que precisa y adquiere voz propia para lograrlo, precisamente en la ONG.








No buscamos sino trabajar por las causas que nos convocan y para ello tratamos de poner lo mejor de nosotros mismos.

Desde :

              - el altruismo,
              - la trasparencia,
              - la avidez de formación,
              - la auto exigencia y
              - la revisión constante.


Asumimos que podemos no acertar, no ser lo eficaces que debemos en nuestro trabajo. Pero no admitimos que se pueda cuestionar el trabajo de todos por la posible vileza de muy pocos.


Amigos en marcha tiene siempre presentes estos principios y casi como obsesión mejorar métodos y ganar eficacia. Al fin lo que importa son las causas por las que trabajamos, porque detrás de ellas hay personas que sufren.

                           Jose Luis Aguillo


  Fuente : Boletín interno nº 41 Amigos en marcha